Tendencias Tecnológicas en educación en los AVA

 

3-¿Como impactan las nuevas tendencias en educación en los ambientes virtuales de aprendizaje?


Las nuevas aplicaciones han venido a reemplazar las aplicaciones de escritorio 1.0 (contenido estático y aburrido)





Definitivamente las herramientas tecnológicas (TIC) han venido a revolucionar las tecnologías tradicionales. Las TIC son indispensables para trabajar de manera sincrónica o asincrónica en los entornos virtuales. Los jóvenes y personas con habilidades digitales pueden desarrollar proyectos de manera colaborativa, crear contenidos de interés, publicar y diseñar todo tipo presentaciones interactivas educativas desde podcast, videos (flip, streamyard, youtube, Tik Tok) etc.

Son excelentes aplicaciones para desarrollar habilidades digitales y fomentar trabajo interactivo y creativo. Los proyectos colaborativos son excelentes para desarrollar pensamiento crítico. La ciberseguridad es importante para proteger tus datos personales.

Las herramientas colaborativas son aplicaciones que permiten trabajar documentos con los aportes de más de una persona, incluso de manera simultánea por lo que los estudiantes suelen mostrarse más participativos y motivados al utilizar este tipo de herramientas.  Entre esta clasificación, las más utilizadas son Google Drive y Dropbox

 En la actualidad la web 2.0 está inmersa en la educación con múltiples aplicaciones modernas que generan un modelo rico en herramientas, espacios de intercambio de datos y pedagógicamente es aprovechado por maestros y estudiantes compartiendo sus producciones digitales y multimedia a través de los recursos de la Web 2.0.



 O´Reilly plantea, que los nuevos desarrollos de Internet (Web 2.0) tienen su principal potencial en que facilitan la conformación de una red de colaboración entre individuos “arquitectura de la participación”. Esta arquitectura se construye alrededor de las personas y no de las tecnologías. Por lo que, cada vez que una persona crea un nuevo enlace, la Red se complejiza, y, por lo tanto, se enriquece.

La IA en a sociedad


De acuerdo a Molina La plataforma Moodle “es una aplicación web de tipo Ambiente Educativo Virtual, sistema de gestión de cursos, de distribución libre, ayuda a los educadores a crear comunidades de aprendizaje en línea” (2014, p. 140).  El uso de las tecnologías durante el confinamiento COVID-19 ha venido a revolucionar de manera radical al sistema de educación, los docentes con el semestre iniciado dieron un giro total encaminado al modelo virtual, multiplicando esfuerzos como gastos, algunos facilitadores no contaban con los equipos necesarios, conexión a internet, conocimientos amplios sobre las tecnologías.

La inteligencia artificial esta presente en nuestro día a día más de lo que somos concientes. Desde nuestro smartphone con su asistente, hasta los spam de nuestro correo electrónico, que diferencian enre correos legitimos y spam empleando aprendizaje autmático. Vivir con la influencia sutil de inteligencia artificial tiene un impacto social positivo pero también una cara B menos visible sobre la que nos proponemos reflexionar en este post para garantizar un marco ético que garantize el bienestar de todos.





La evolución de los medios en la era digital, y la necesidad de avanzar en el conocimiento sobre los procesos de mediación y remediación, que propician las nuevas tecnologías, diferenciándolos de los generados hasta ahora por los medios analógicos tradicionales (libro impreso, cine, televisión). La digitalización ha dado lugar a nuevas realidades y propuestas, como las redes sociales, los videojuegos o las aplicaciones de realidad aumentada. El siguiente paso en nuestra cultura de medios está siendo la multiplicación y diversificación continuada de formatos, y por tanto de nuevas formas de interacción mediada. Los procesos de mediación generados contribuyen a la modificación de modelos de comunicación y también formas de enseñanza. Es evidente su impacto en las instituciones educativas, y en la universidad. Como contribución a este análisis se aporta y define el concepto de remediación tecnológica. Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC) representan, bajo las consideraciones aquí formuladas, una oportunidad de cambio en algunos aspectos y procedimientos de los mandatos principales de la universidad: docencia, investigación y gestión. Ser proactivo ante esta nueva realidad es determinante, ya que la capacidad de adaptación está vinculada a la supervivencia de la propia Universidad La modernidad en la que se sitúan hoy nuestras sociedades avanzadas ha incorporado una serie de características que conviene tener presentes a la hora de analizar el impacto real producido por las nuevas tecnologías digitales en nuestra cultura. Este concepto, cultura, puede explicarse como el resultado de la gestión del pensamiento y el comportamiento humanos. Hablamos de un término cambiante que evoluciona y modifica sus referencias. La posmodernidad que viene a describir nuestro modo de vida en las sociedades actuales, y que se caracteriza por no mantener unos esquemas fijos que permitan analizar con sosiego la realidad, es calificada por Bauman (2017) como ‘modernidad líquida’. Un concepto que lleva a considerar las situaciones y los procesos sociales en permanente transformación. En coherencia con estos referentes cambiantes, una de las características más visibles de la cultura contemporánea es la presencia de las tecnologías en múltiples ámbitos y su constante evolución, muy acelerada en los últimos años. Uno de los aspectos más evidentes de esta realidad cultural es que nuestra relación con los medios se está transformando. La cultura mediática actual desde luego sigue incluyendo formatos tradicionales como libros en soporte papel, fotografía, cine, radio o televisión; aunque todos ellos tienen versiones digitales, a las que accedemos mediante múltiples soportes como e-books, tablets, ordenadores portátiles, smartphones, televisores digitales o relojes inteligentes. Estas tecnologías que hoy nos acompañan en muchas de las actividades que realizamos cotidianamente, se caracterizan por su ubicuidad. Y las nuevas aplicaciones digitales como las redes sociales, los videojuegos o la realidad aumentada, inciden en las formas de mediación que los medios generan. Esto influye en la manera en que nos relacionamos con la información y con los productos culturales. Si nos situamos en el campo educativo, la proyección de la realidad antes descrita ha ido produciendo cambios e incorporaciones que han tenido un impacto y por tanto ha generado nuevas necesidades, que las políticas educativas han asumido y cuyas decisiones se han ido concretando en inversiones y cambios en los modelos de gestión. 



También ha habido cambios en las formas de enseñanza, incorporando nuevas infraestructuras, herramientas digitales y formas de trabajar. Si nos circunscribimos al ámbito universitario, cabe hacer varias consideraciones. En un interesante texto colectivo, compilado por Matthew S. Pittinsky (2006) se proponía a los diferentes autores participantes en el mismo, la cuestión de si la incorporación de nuevas opciones tecnológicas a la educación superior como el e-learning, suponía un proceso de cambio radical o progresivo. Levine (2006) responde a esta cuestión identificando cinco factores que impulsan los cambios. En primer lugar, cabe hablar de una sociedad que ha pasado de tener una base industrial a priorizar la información como motor económico. Esto supone un reto dirigido directamente a las universidades. La formación es una necesidad social, económica y ética, que sustenta la información y el conocimiento, y que además debe continuar durante toda la vida. En segundo lugar, el perfil de los estudiantes universitarios ha ido cambiando. En la actualidad su franja de edad se ha ampliado, de manera que no solamente son los jóvenes los que demandan una formación universitaria de calidad. También se han ido incorporando otros aspectos como la internacionalización o la inmigración que varían el perfil de los estudiantes. Esto ha generado una competencia entre las universidades para captar nuevos alumnos e inversiones, dando pie a comparaciones como las que se plasman en los diferentes ‘rankings’, que dibujan una lucha por la excelencia. El tercer factor de impacto, según Levine, es que va a ser clave la manera en que las instituciones universitarias resuelvan la integración de las nuevas tecnologías digitales, ya que constituye el mayor factor de expansión del que hasta ahora han dispuesto. El cuarto factor a tener en cuenta es el creciente peso de las universidades privadas; esto representa una realidad a nivel global, y también lógicamente en el caso de España. Esta incorporación viene favorecida precisamente por, entre otros factores, el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). El quinto componente de cambio, según Levine, hay que buscarlo en la convergencia entre las empresas dedicadas a la creación de contenidos y conocimiento (editoriales, grupos mediáticos, museos, etc.) y las universidades, utilizando cada vez en mayor medida las nuevas tecnologías para difundir sus productos. De hecho, hoy día la oferta de ‘cursos’ es muy amplia a todos los niveles, de manera que la formación superior, formal y no formal, no es exclusiva del mundo universitario.







En el ámbito de la investigación, la universidad ha venido manteniendo un estatus preferente, ya que ha conseguido en buena medida preservar su capacidad en este campo, apoyándose en la libertad académica. Este derecho universitario se deriva del término lehrfreiheit, una práctica proveniente de la universidad alemana del siglo XIX, que hace referencia a la libertad del profesorado para llevar a cabo la investigación y enseñar los resultados de la misma en el aula y fuera de ella, sin interferencias institucionales o sociales (Levine, 2006, p. 35)

En la incorporación de las tecnologías digitales a la universidad influyen factores diversos como los señalados con anterioridad, pero en último término, para que la enseñanza y el aprendizaje evolucionen hacia nuevas formas, buscando la mejora, es el profesorado la pieza clave y el que marca el camino a seguir. Es su concepción docente la que debe servir de referencia, pero para buscar esa mejora debe tener un apoyo institucional, que a su vez debe saber ordenar sus prioridades.

https://www.redalyc.org/journal/3314/331455826006/331455826006.pdf

 


Comentarios

  1. La educación virtual permite la generación de diferentes escenarios que permiten tanto a docentes, estudiantes como a las instituciones educativas en general el aprovechamiento de las oportunidades y la generación de espacios que permitan mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje en contextos sociales y de trabajo colaborativo que se adaptan a la sociedad actual. Para autores como Díaz- Barriga (2013) y Tapia y León (2013), existen una serie de lineamientos que avalan la inclusión de la tecnología en la educación, el primero de ellos es el fácil acceso a la información, mayor alcance y mejor nivel de comunicación y por último la generación de competencias que permiten a estudiantes y docentes adaptarse a los desafíos que impone la globalización.

    Es así como la educación virtual puede ser definida como aquel proceso educativo (que involucra tanto la enseñanza como el aprendizaje) que se da mediante el uso de la tecnología y que en ocasiones, depende del alcance que posea, deja de lado las clases presenciales. Esta educación virtual puede darse de dos formas: sin la presencia de un docente, a través de una plataforma de respuestas estandarizadas o con la guía de un docente con el cual los estudiantes pueden participar de forma continua en diferentes sesiones.
    A nivel de gestión educativa se visualiza la educación virtual como un proceso que se lleva a cabo mediante la combinación de una serie de tareas sistemáticas que se encuentran enmarcadas en 4 áreas:
    - Organizacional, corresponde con el seguimiento y control de los procesos de formación tanto de docentes (para su capacitación en el manejo de los recursos) como de estudiantes (para la correcta utilización de los recursos didácticos y de evaluación), es decir, tiene que ver con la práctica institucional.
    - Tecnológica, es la herramienta a través de cual se dan los procesos de comunicación, docente-estudiante y estudiante-docente, además posee diversidad de instrumentos que sirven de apoyo para el desarrollo de las clases.
    - Educativa, es el área que permite la creación de los planes de estudio, objetivos de las asignaturas, distribución de contenido, entre otros elementos que colaboren para que el proceso de enseñanza y aprendizaje se dé forma satisfactoria.
    - Impacto social, es el que comprende los valores y opiniones de la praxis educativa en la educación virtual.
    Para Granados (2015), la educación virtual aporta a la transformación del proceso educativo debido a que implica un proceso educativo amplio y de largo alcance que debe ser controlado a través de diferentes sistemas que den cuenta de su aporte a la práctica educativa, es un campo de emplea agentes innovadores para la construcción del conocimiento dándole brindándole autenticidad al aprendizaje.


    EDUCACIÓN VIRTUAL COMO AGENTE TRANSFORMADOR DE LOS PROCESOS DE APRENDIZAJE
    Revista on line de Política e Gestão Educacional, vol. 24, núm. 3, pp. 1216-1225, 2020
    Universidade Estadual Paulista Júlio de Mesquita Filho, Faculdade de Ciências e Letras

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